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viernes, 23 de diciembre de 2016

Los espíritus ahogados.






¡Hola a todos!

Ya llevaba unos diítas sin publicar una entrada, ¡pero hoy he vuelto con una nueva que es muy importante para mí!
Como ya muchos de vosotros sabéis, hace unos meses publicaba "extrañas historias de Japón", un libro formado por un buen puñado de relatos, cada uno de ellos dedicado a un yokai en concreto.
Disfruté mucho escribiendo cada uno de los relatos, por lo que al poco de tenerlo publicado me surgió la idea de escribir un segundo libro, pero esa vez dedicada exclusivamente a los yurei, los equivalentes orientales a nuestros fantasmas de toda la vida.

jueves, 1 de diciembre de 2016

La reina sin cabeza.





La mente de un escritor es compleja, a veces demasiado… No hay nada que ellos no puedan observar sin sacar varias conclusiones de las cuales, y no pocas veces, puede nacer la primera nota de inspiración para una historia extraordinaria. Pero entre todos esos lugares, objetos, personas, situaciones… Hay algunos capaces de despertar esos mismos sentimientos en la mente de todos los mortales, sentimientos que pueden convertirse en miedo una vez estés rodeado de su “magia” y que, incluso, te obligue a tapar tu cabeza por completo con el edredón una vez te veas de nuevo solo en tu habitación.
Lugares como estos hay muchos, es cierto, cualquier escritor que este leyendo esto lo sabrá, pero hoy quiero hablaros de uno que visité hace poco, y aunque no era la primera vez que me encontraba entre sus muros, esta vez su historia despertó en mi las ganas de escribir este relato cuya protagonista poco me falto para poder ver con mis propios ojos. La Torre de Londres.
Fue rodeada por las piedras de la primera muralla que lo rodea cuando empecé a escribir estas líneas, mires donde mires, empezando por esos seis negros cuervos que intentan mantener la existencia de la monarquía británica, hasta la imponente torre verde rodeada de susurros del pasado… Todo es inspiración, pero para ver algunas cosas hay que saber dónde mirar…
¡Espero que lo disfrutéis!

martes, 29 de noviembre de 2016

Cuando las mujeres nos miran.


Los enormes bloques de piedra que formaban los torreones de la catedral cayeron estrepitosamente sobre algunos ciudadanos, incluso algunas gárgolas, con una ira escarlata en la mirada, se desprendieron de ellos y empezaron a levantar los cuerpos de los caídos, como queriendo protegerlos de ser aplastados por las rocas. El polvo y la destrucción lo inundaba todo… Los cuernos de aviso no dejaban de sonar, llamando así a  la lucha a un nuevo grupo de guerreros cada vez, a medida que sus compañeros iban cayendo…
Mirase donde mirase solo veía destrucción y sangre, los gritos de todos los ciudadanos se ahogaban entre el estruendo de la devastación. Aquellos gigantescos tentáculos lo estaban arrastrando todo hacía el abismo…

domingo, 13 de noviembre de 2016

Reseña "El poder del medallón"







¡Hola a todos! 

Hoy estoy muy contenta porque os traigo una reseña personal de la primera obra de mi amiga Noemí Hernandez, una joven escritora buscando un sitio en el mundo de las letras, y en la que se aprecia la dedicación y el cariño que se le ha volcado.
Se trata de una obra especial por partida doble, la primera porque es la primera obra publicada de esta escritora, y la segunda porque esta realizada con la ayuda de su sobrina Laura. Si ya de por si hace ilusión publicar un libro por primera vez, ¡no me puedo ni imaginar la que se debe de sentir cuando además es un trabajo realizado con la ayuda de uno de tus seres más queridos!

martes, 8 de noviembre de 2016

¡Mi primer book tag!


¡Muy buenas tardes a todos! ¿Cómo estáis?

Hoy os traigo una buena noticia, ¡mi blog ha sido nominado por segunda vez! En este caso se trata de una actividad igual de interesante que los premios dardo, e igualmente se trata de dar a conocer algunos de esos blogs que tanto nos gustan pero que, desgraciadamente, aun no cuentan con demasiados seguidores.

sábado, 22 de octubre de 2016

El poder del medallón.



¡Hola a todos!

Hoy os traigo un adelanto de la que será la primer trabajo de mi amiga Noemí, autora también del blog Relatos la doncella errante y una joven escritora que promete en este mundo de las letras.

"El poder del medallón" es una novela fantástica, amena de leer, y con unos protagonistas que cuentan prácticamente con la edad para la que está destinada su lectura, lo que hace que sus lectores logren empatizar rápidamente con ellos.

miércoles, 19 de octubre de 2016

Y tú... ¿Temes a la muerte?



El frío de la noche ya empezaba a apretar y, arrobándome de nuevo con el único abrigo que tenía, dirigí una nueva mirada a la ventana.
Desde aquel estrecho cubículo se alcanzaban a ver los muelles, en aquel momento abarrotados de navíos, mayoritariamente galeones y fragatas tripulados por seres que ya habían perdido todo el honor y la pizca de humanidad que quedaba en sus fríos corazones. El color de sus velas era casi indistinguible debido a la oscuridad que ya lo bañaba todo. 

lunes, 17 de octubre de 2016

Viscoso Azabache





¡Hola a todos!
Hoy os traigo una nueva reseña, en este caso de la obra de un escritor independiente como yo, José Augusto Andrade.


  • Título: Viscoso Azabache.
  • Autor: Jose Augusto Andrade.
  • Número de páginas: 398.
  • Género: Erótico-terror.
  • Disponible en Kindle y tapa blanda.

El la imagen adjunta podréis leer la sinopsis de esta original novela que mezcla el género erótico con el de terror de una manera asombrosa. Aunque he de advertir que esta obra trata un género erótico con un toque morboso bastante particular, es ideal para aquellos lectores amantes de este tipo de lectura que quiera ir más allá es sus lecturas típicamente eróticas, dentro de lo que cabe. A mí personalmente, me ha resultado bastante original en ese sentido.

martes, 11 de octubre de 2016

Aquel cuadro...




Muchas veces he intentado escribir relatos de terror, pero lo cierto es que muchos de ellos no terminaban de producirme escalofríos, o ni siquiera esa sensación de incomodidad que se siente al leer algo que te causa escalofríos... Por eso pensé, ¿por qué no meter en el tema principal aquella no a nosotros mismos nos dé miedo de verdad? Aquí os va un relato de "inocentes" payasos...

lunes, 10 de octubre de 2016

Signos de puntuación en los diálogos





¡Muy buenas tardes!

A medida que voy escribiendo voy descubriendo más cosas que hacen que los escritos, obras, relatos, cuentos... Sean más fáciles de leer, y estén más acorde a las reglas de ortografía española. En esta entrada no hablaré de esos cambios que no hace mucho hizo la RAE, entre los que se encuentran muchas palabras que ahora se escriben sin tilde, como por ejemplo guion... Si, ahora se escribe sin tilde, duele a la vista, es un echo, pero ahora es así...
Hoy hablaré del correcto uso de los signos de puntuación en los diálogos, algo que a primera vista parece sencillo pero, en realidad, muy pocos autores tienen en cuenta esos detalles.

miércoles, 5 de octubre de 2016

¡Premios dardo!


¡Es para mi todo un orgullo poder publicar una entrada como esta! Por primera vez mi blog (y yo, jajaja) ha sido nominado a algo, en este caso a los Premios Blogger Recognition Award, los premios dardo, ¡premio que acepto con muchísimo cariño!

La función de los premios dardo es agilizar las comunicaciones entre unos bloggers y otros, mostrando tu admiración y aprecio a esas personas que día a día publican en sus blogs, en los que tanto esfuerzo y cariño depositan solo para compartir con los demás lo que mejor saben hacer, ¡o simplemente las cosas que más les gustan!

Una vez te hayas recibido el premio te toca elegir a otros 15 bloggeros a los que entregárselo, al igual que hicieron contigo. De esta manera se ayuda a la promoción de bloggers que de momento aún cuentan con pocos seguidores, creándose así una maravillosa cadena de recomendaciones que nos ayudará a crecer más y más.

Aquí os dejo las normas de nominación, !leedlas bien porque puede que alguno de ustedes sea el siguiente en seguirlas!:

1-Crear en tu blog una entrada referente al premio. ¡No os olvidéis incluir la imagen del premio en el blog! (La de más arriba).

2-Agradecer en el alma a aquel que os haya nominado a vosotros, señalando también el enlace a su blog. En mi caso es Fátima Alba Buiza, de Refugio de Letras. Amiga, muchísimas gracias por acordarte de mi para la nominación, ¡espero que tu estupendísimo blog de reseñas llegue muy alto! 


3-Por último, debéis indicar cuales son los 15 blogs a los que nomináis.

¡Y aquí van mis primeros 6 dardos!:


En mi siguiente entrada publicaré el resto de nombres. ¡¡Muy buen día a todos!!
¡Mil besos!



lunes, 26 de septiembre de 2016

Cómo publicar un libro en Amazon (paso a paso)


¡Buenas tardes a todos!


Tenía muchas ganas de publicar esta entrada, ya que muchos de vosotros, sobre todo los que no conocen Amazon, me habéis preguntado sobre este tema.
En la actualidad tenemos disponibles muchas plataformas que nos dan las mismas opciones de Amazon, pero al ser esta la que más alcance internacional tiene y la que más gente conoce, se convierte en la opción perfecta para empezar a distribuir nuestras primeras obras.

lunes, 19 de septiembre de 2016

Consejos para escribir una novela.




Muchos de nosotros, ávidos y voraces lectores que un día decidimos dar el paso y ponernos a escribir nuestra propia historia, nos encontramos con un mismo problema, ¿por dónde empezamos?
La respuesta parece sencilla pero, una vez con una pluma en la mano, o ante el word de nuestro ordenador, nos solemos quedar más en blanco que la propia pantalla, ¿verdad?

Muchas veces no basta con tener una idea, eso es muy importante, lo fundamental para empezar a escribir, pero si nuestra cabeza no tiene bien estructurada la historia en la que esa idea se desarrollará tendremos muchos problemas para terminar un primer capitulo, lo que nos llevará inevitablemente a la frustración y al abandono del proyecto.

miércoles, 14 de septiembre de 2016

"El hechizo", ¡ya en Amazon!




¡Hola a todos!

Antes que nada quiero pediros disculpas por haber tardado tanto en publicar este libro, ya que dije en una de las entradas pasadas que lo haría hace ya una semana, pero por diversos problemas de internet no he podido hacerlo antes. 

¡Pero aquí está! Recién salidito del horno y totalmente gratis a partir de mañana, día 15, hasta el día 20. 

Tardé bastante tiempo en escribir esta historia, de hecho, hace dos años que empecé a empecé para terminarla hace menos de un mes. En principio no tenía intención de que terminara siendo una novela, pues fue un acontecimiento familiar lo que me inspiró para las primeras líneas, las cuales sentía más como una forma de desahogo que para un obra. ¡Pero ya veis! Quizá ese acontecimiento me afectara de esa manera para escribir esta obra. 

Va por ti, abuelo.


martes, 13 de septiembre de 2016

Bien vale un suspenso



Al principio pensé que aquella extraña sombra solamente era producto de mi imaginación, pero no tardé mucho en descartar aquella idea. Desde la ventana de mi habitación pude ver claramente cómo iba tomando forma, como desplegaba una especie de alas como queriendo saludarme, y como lo que parecía ser un pico curvo se distinguía claramente en la masa negra que muy probablemente era cabeza. ¿Un águila en medio de esta gran ciudad? No, imposible… ¿O no?..

miércoles, 7 de septiembre de 2016

El maestro






Aquellas espadas caían al suelo de forma constante, al igual que los guerreros. Muchos de ellos ya presentaban algunas heridas en su cuerpo a pesar de que las armas estaban hechas de madera, pero se volvían a levantar con gritos de rabia y coraje entre las nubes de polvo que levantaban al caer. El sol ya estaba cayendo, dotando a la tierra de un color rojizo, haciendo que pareciera bañada por la sangre de los 8 guerreros.
El pequeño Alejandro los observaba apoyado en la ventana, sus enormes ojos dispares estaban tristes, y parecían a punto de inundarse en lágrimas.

lunes, 5 de septiembre de 2016

"El hijo de Rosemary"





Título: El hijo de Rosemary.
Autor: Ira Levin.
Numero de páginas: 233.
Precio: 8,99 Euros.
Editorial: Mondadori.
Tapa: Blanda.


Sinopsis: “La semilla del diablo” estremeció con la sorprendente y tenebrosamente brillante historia del nacimiento del hijo de Satán en el Manhattan de hoy, y se convirtió en un clásico como novela y película.
“El hijo de Rosemary”, su continuación, arranca en Nueva York a finales de 1999. En el umbral del nuevo milenio, Rosemary se reúne con su hijo y se libra la batalla definitiva entre el bien y el mal.





Opinión personal: Empecé a leer este libro nada más terminar de ver por primera vez la gran obra de Polanski, y la verdad es que, a pesar de que cierra varias puertas que el final de esta cinta dejó tan abiertas, pienso que si solo hubiera quedado “la semilla del diablo”, así, sin secuela, hubiera sido mejor.
Personalmente también, la narrativa de Levin no es una de mis favoritas, pero hay que reconocer que sabe poner al lector en el mismo sitio en el que se sitúa Rosemary utilizando las palabras justas. 

Esta obra empieza con una Rosemary que recientemente acaba de cumplir 50 años, llevando los últimos 27 en un coma profundo del que pocos confiaban que despertara. El último recuerdo que tiene antes de caer dormida, que aún sigue tan vivo en su cabeza como si solo hiciera unas horas que hubiera pasado, es el de su pequeño Andy, de 6 años, viendo una serie animada en la televisión.
Presa de un terrible terror e impotencia, Rosemary no deja de pensar en qué podría haber sido de su hijo, desde entonces en mano del oscuro matrimonio Castevet y del resto de vecinos que formaban tan siniestras reuniones. ¿Qué clase de horrores habrían metido en la cabeza de su pequeño?
Afortunadamente no pasa mucho tiempo hasta que la nueva Rosemary tiene noticias de su hijo, ahora un atractivo joven de 33 años con un gran parecido a Jesucristo. Sus ojos amarillos han desaparecido para dejar paso a unos hermosos orbes color avellana, su cabello es largo y castaño, y sus manos no tienen el aspecto de garras tan propio de su verdadero padre.
Andy es el representante de una gran plataforma llamada Hijos de Dios, la cual llega hasta el último rincón del planeta. Su objetivo es claro, unir a todos los habitantes del globo tal y como lo haría el hijo de Dios en la tierra. Al conocer estas intenciones, nuestra protagonista se ve envuelta en un torbellino de dudas, en el que lo único seguro es el amor tan puro que siente hacia su hijo. ¿Tan efectivo fue el trabajo que ella hizo durante los primeros 6 años de la vida de Andy, o fueron sus siniestros vecinos los que lograron disfrazarlo tan extraordinariamente para que fuera capaz de engañar al mundo entero para conseguir sus objetivos?

No sé en que lugar leí una vez una especie de profecía que decía (más o menos): Llegará el día en el que el mal vuelva a la tierra disfrazado de la más infinita bondad, intentando ganarse con curaciones y bienes a todos los habitantes de la mismas. Ese día y no otro, es el que los mortales más deberíamos temer.
Y esta, según mi opinión, es la frase que mejor resume este libro.




lunes, 22 de agosto de 2016

Donde duermen los dragones

¡Hola a todos!

Hoy estoy muy contenta porque en apenas unos días ya podré compartir con todos vosotros la novela épica en la que he estado trabajando tanto tiempo: "Donde duermen los dragones".


Los dragones siempre han sido mis criaturas legendarias favoritas, imprescindibles en una historia fantástica, en la que tampoco puede faltar la magia, el valor de la amistad, la valentía, el miedo y el amor para ser perfecta para mi. "Donde duermen los dragones" es la primera parte de la trilogía con el mismo nombre, y está dotada de todas estas cosas y de alguna que otra más, para que todos aquellos que la leáis podáis sumergiros en un mundo extraño, aunque peligrosamente parecido al nuestro.

¡Aquí os dejo una pequeña muestra, prólogo y primer capítulo, espero que lo disfrutéis!

martes, 19 de julio de 2016

Audio relatos "La doncella errante"


Entre los cientos y miles de blogs literarios que hay actualmente en la red, hoy quiero compartir con vosotros uno de los que más ha llamado mi atención, se llama "Relatos la doncella errante", y no es porque su autora sea amiga mía, ¡sino porque es una de las pocas escritoras de la que me gustaría aprender!

martes, 12 de julio de 2016

Un enemigo inesperado


Su nombre era Annie Chapman, tenía 47 años, y se dedicaba a la prostitución. Su cadáver estaba completamente cubierto por una sábana blanca en la que se apreciaban grandes cercos de sangre que, al ser retirada, dejó a la vista un cuello salvajemente abierto de parte a parte dos con dos profundos cortes. Su cabeza aún estaba débilmente unida a su cuerpo por un escaso trozo de carne. Su vientre había sido abierto, sin duda, con una exquisita precisión quirúrgica, sobre él habían sido colocadas las vísceras sustraídas.
Al igual que la primera vez, sentí un ligero sabor a bilis en la boca. Había visto cientos de cadáveres en mi vida, muchos de ellos pertenecientes a personas que había tenido la desgracia de sufrir una muerte bastante cruenta, pero aquello era diferente… Los ojos aún abiertos de aquella desdichada mujer, con casi la totalidad de su cuerpo teñido de sangre, era superior a mi fortaleza mental.

miércoles, 6 de julio de 2016

El hechizo





En muchas ocasiones las historias que nacen en nuestra mente son inspiradas por algún hecho que nos rodea en el momento de escribirlas, o que ya ha tenido lugar en nuestras vidas... Pero no siempre somos conscientes de lo que esas situaciones o vivencias nos marcan a la hora de escribir, solo con el paso del tiempo lo descubrimos, si es que lo hacemos. 
Hoy quiero compartir con vosotros el comienzo de mi próxima obra, que pronto estará disponible en Amazon. Tardé un año en darme cuenta de lo que realmente quise transmitir al escribirla, y aquí os dejo su mensaje.

lunes, 20 de junio de 2016

Grandes frases de 20 grandes libros que deberías leer.







Muchos son los libros que pasan por nuestras manos, algunos mejores que otros... Muchos nos marcan por su increíble historia, por su gran final, por su hermosa narrativa o... Simplemente con una frase que ya no se nos podrá olvidar nunca.
Son muchos libros los que he tenido la oportunidad de leer, al igual que muchos de vosotros, y muchas de sus frases llegaron a tocarme. Aquí solo compartiré 20 pero, para ser sincera, ¡necesitaría al menos una semana para hacer una buena lista de ellas! A parte de ser lapidarias algunas de ella son una auténtica lección de vida. Las de esta entrada pertenecen a libros que todo amante de la literatura debería leer, espero que os gusten, que no os sean del todo desconocidas y que os traigan muy buenos recuerdos. ¡Un saludo!

martes, 7 de junio de 2016

Gorgonas




El camerino era bastante espacioso, con tres grandes tocadores, uno para cada una. Las cortinas de las ventanas estaban especialmente colocadas como para que la luz del sol pudiera entrar en la habitación, y a la vez, impedir que ningún curioso pudiese asomarse por ellas.
Las tres hermanas habían llegado hacía solo 2 horas, el viaje había sido largo, y mientras Acantha daba cabezadas en el sofá, y Hécate se deleitaba con un caliente baño perfumado con vainilla, Adara se encontraba delante del único espejo que las jóvenes habían dejado sin cubrir.

sábado, 4 de junio de 2016

No solo los príncipes aman




Hoy quería compartir con vosotros un texto que escribí hace mucho tiempo y que, con el tiempo, me inspiró tanto que acabó convirtiéndose en la que yo llamo "joya de la corona" de todos mis escritos.
Es este pequeño relato ya aparecen dos de mis grandes protagonistas, Katian y Akerón, además del eterno amor de uno de ellos.
Aunque ya en la novela de la que son protagonistas han cambiado un poquito más, su esencia nació el día que escribí este relato. Espero de verdad que disfrutéis con él, ¡ya estoy muriéndome de ganas por compartir con vosotros la increíble historia de estos dos peculiares amigos!

martes, 24 de mayo de 2016

El cuervo




Lo que a continuación quisiera compartir con todos vosotros es algo que nunca me había planteado hacer, ya que siempre he considerado que continuar algo que ha empezado otra persona me parece un sacrilegio para su memoria. Pero es algo que me salió del corazón, como si sintiera un arrebato, fruto de la gran pasión que siempre sentí hacia uno de los más grandes escritores románticos de nuestra historia, que me empujara a hacerlo.
Para él no había un tema mejor para tratar en sus poemas que el del desamor humano, sobre todo aquel que habla de la perdida de la amada justo en el momento en que disfrutaba de su belleza y juventud. Pero yo pienso… ¿Por qué los mejores poemas de amor son los que tratan temas trágicos? ¿Por qué no al contrario? ¿Por qué no los que tratan de un amor encontrado, de un bonito reencuentro, o que simplemente tengan un desenlace prometedor?
Ya sea porque quise ponerle un desenlace feliz a uno de sus más famosos poemas, hermoso por su aire triste y melancólico que tanto caracterizaban a su autor, nació el que os muestro hoy.
La protagonista de mi poema, al igual que el del suyo, recibe esa inusual visita que la martiriza con las dos mismas palabras: “Nunca más”, pero que en esta ocasión, encierran un mensaje completamente distinto y opuesto. Es por ello también que he querido hacerlo de la forma más fiel y parecida posible a su antecesor, para que así, se pueda asemejar más a una continuación del mismo, cargada con un poquito de esperanza, que a un poema independiente.
Dicho todo esto, os presento mi propio “cuervo”, siempre desde el mayor respeto que un autor novel pueda sentir por uno de los grandes. Espero de verdad que os guste, y que disfrutéis leyéndolo tanto como yo lo hice escribiéndolo.




EL CUERVO

Ya casi estaba dormida, con la cabeza hundida en el sofá,
cuando las fatigadas campanadas de media noche me volvieron a despertar,
rompiendo mi silencio, de nuevo oscureciendo mi soledad…
Arrastrando con ellas tan tristes y fúnebres recuerdos de días pasados,
desde los cuales, mi encogido corazón parecía haberme abandonado.
“Se ha ido con él—me dije—ya no lo necesitarás más”.

Ah!… Recuerdo claramente esos ojos que tan fijos me miraban,
las tiernas caricias que me abrumaban,
y aquellos brazos que tan tibiamente me arropaban.
Aquellos brazos… Los mismos que ayudaban
a alejar de mi la oscuridad,
Y que tan precipitadamente se alejaron para ya no volver más.

De repente, mi temeroso corazón en mi pecho volvió a saltar,
pues un leve golpe en la ventana lo había hecho reaccionar.
Curiosa, intenté adivinar lo que había al otro lado de la ventana,
“Será—dije—algún animalillo, quizá la rama de un árbol
que ha ido a chocar contra el cristal de la ventana.
Eso es todo, y nada más”.

Cansada y abrumada, me senté en el sillón junto al fuego,
sus cartas habían sido mi único consuelo, mis compañeras de duelo.
Las había leído una y otra vez, durante aquellas largas noches de soledad…
Ahora, negras hileras saladas habían borrado las hermosas palabras
que formaban las más hermosas promesas, ahora rotas…
Promesas que ya tan solo por mi memoria serían recordadas.

De nuevo, aquel molesto ruido me arrancó de mi aflicción,
temerosa, miré hacia la ventana, medio escondida tras del sillón.
Me sentía como una niña leyendo historias de terror,
esas en las que el asesino ha irrumpido en el caserón.
Una ráfaga de viento frío había abierto los postigos,
haciendo bailar las llamas, ondear los visillos…

Rápida, me dispuse a cerrarla de nuevo,
pero solo cuando estaba a punto de hacerlo,
irrumpió en mi habitación, con alas plegadas, un atezado cuervo.
El descortés invitado, revoloteó con aires desconsiderados,
y después de haber dado dos vueltas a la habitación,
se posó sobre el sillón, luego sobre en el montón de cartas, y nada más.

Con la respiración contenida me quede observando a esa ave decidida,
que con su figura erguida parecía mirarme orgullosa sobre la correspondencia recibida.
Durante varios segundos me sentí cohibida,
temerosa como pocas veces en mi vida.
Cautelosa, volví a abrir la ventana, instándolo a retornar,
a lo que esa ave maldita me contestó sin vacilar: “Nunca más”.

Permanecí aturdida unos instantes, sin saber cómo reaccionar,
en sus negros ojos brillaba el reflejo de las llamas con aire sobrenatural…
“¿De verdad me había hablado?—Pensé—No,
solo ha sido tu trastornada mente,
tu cerebro maltratado por la falta de sueño.
Eso es todo, y nada más”.

Intencionadamente dejé ligeramente abierto el ventanal,
y volví a sentarme junto al él, junto al fuego del hogar.
“Ya te irás”—pensé,—“todos se van”. Pobre de mí…
 ¡Oh! Markus… Maldito fue el día en que me dejaste
maldito fue el día en que zarpaste hacia alta mar,
ese mar que ya sería tu tumba, por siempre jamás…

Volví a coger las cartas, preparada para seguir leyendo,
acariciando cada una de ellas como si fuera un rico lienzo,
dispuesta a seguir martirizándome con cada palabra grabada en ellas,
palabras que me hicieran volar…
Más ni una sola de ellas logré arrancar,
pues sentía aquellos ojos de ébano volviéndome a mirar.

Molesta, me volví hacia avechucho,
descubriendo su lóbrega silueta recortada entre las llamas,
que de pronto me hizo sentir azarada.
Acobardada, y casi susurrando,
le rogué de nuevo que se apresurara a marchar,
a lo que el cuervo volvió a contestar: “Nunca más”.

“¡No te he invitado!—Le grité.—Has sido tú el que ha
entrado sin permiso, perturbando mi soledad…
Vete, sal ahora mismo por la ventana
y pensaré que solo ha sido fruto de la casualidad
lo que te ha traído aquí”.
Y el cuervo dijo: “Nunca más”.

Furiosa me levanté, hasta ponerme frente a él.
“¿Quieres atormentarme? Vete ahora, sal por la ventana
y pensaré que solo estás aquí por casualidad”.
Repetí aquella súplica por tres veces, casi con brusquedad,
hasta que ya, antes de volver a empezar…
El cuervo dijo: “Nunca más”.

La sangre corría y latía en mis venas a toda velocidad,
mi cuerpo y mi cabeza comenzaron a desarrollar
una desagradable hostilidad.
Impotente, lo volví a mirar,
a aquel que sentía usurpar mi intimidad,
ocupar mi salón, mortificar mi soledad…

Con furia, abrí de par en par la ventana,
mis largos cabellos, arrastrados por el viento,
interpuestos entre mis ojos y los del cuervo,
cuya presencia de alimaña insoportable,
ya me resultaba intolerable.

 El ave seguía allí, ni siquiera se movió,
casi podía sentir su pico clavándose en mi corazón,
ese mismo al que ya solo los cuervos harían compañía por compasión.
Seguía mirándome, retándome…
Como riéndose de mi imagen suplicante,
de mis lloros y palabras suplicantes.

Me dirigí al sillón y le arrojé uno de sus aterciopelados cojines,
Y luego otro, y otro… De nada sirvió…
Seguía allí parado, inmóvil,  como una estatua
perteneciente al propio mobiliario del salón,
observándome con su recortada silueta
desde su estratégica y estudiada posición.

Solo cuando le tiré el cuarto cojín reaccionó,
sobrevolando toda la habitación,
y empujando a su paso, con el diabólico batir de sus alas,
las cartas de mi amado Markus, directamente a las llamas.
Desesperada, y sin poder hacer nada,
sólo pude ver cómo eran devoradas.

Oh, Markus…
Que en mi mente queden esas hermosas palabras,
esos versos tan románticamente compuestos,
Y que no te fueron devueltos.
Esas promesas con desenlace nupcial,
dedicadas a aquella cuyos ojos ya no te verían más…

Entonces, ya no pudiendo más, abandoné el salón con un arrebato,
deteniéndome entonces en mi puerta,
observando la ventana abierta,
Anhelando mi libertad, esperando poder verlo salir…
Pero de repente, otra sensación se apoderó de mí
pues fue algo muy diferente aquello que vi…

Lo vi a él, parado allí, casi envuelto en la oscuridad enfrente de mí.
Junto a él, otra ventana abierta con ondeantes cortinas,
como esperando que salieran sus miedos y fatigas.
Con ojos rojos por el llanto me miraba,
sujetando fuertemente el gran libro que portaba.
Parecía asustado, atormentado, ansioso… Como yo…

De repente, un segundo cuervo salió volando desde su ventana,
Y el mismo fue seguido por el mío.
No fue alivió lo que sentí al verlo salir,
si he de ser sincera, ni siquiera lo vi.
Mi corazón sintió algo diferente, extraño, hermoso…
Y entonces, solo en ese momento, pude comprenderlo todo…

 Los dos pájaros, o ángeles, alzaron juntos el vuelo,
perdiéndose en aquella plutónica oscuridad,
en la negra e infinita inmensidad…
Y se elevaron… Se elevaron con las alas de nuestras almas,
almas a las que ya no perturbaba la oscuridad,
pues ya no volverían a estar solas, nunca más.


lunes, 2 de mayo de 2016

Ya es mía...



In nomine dei nostri Satanas Lucifer exclesi,
in nomine dei nostri Satanas Lucifer exclesi…

Y así hasta tres… Aquel fue el final de la invocación, la llamada que le hacía al ángel del averno para que escuchara mis plegarias, mis plegarias arrastradas por el viento de la noche entre aromas de ceras derretidas. Me había costado mucho decidirme, pero definitivamente lo había hecho… Estos malditos celos me habían llevado hasta allí.
Nunca había destacado en nada, nunca me había sentido realizado… Desde pequeño siempre había sido el segundón, detrás de mi hermano Markus. El era 3 años mayor que yo, mejor estudiante, mejor amigo, mejor hermano y mejor hijo… No había en él nada que no pareciese perfecto, pero sobre todas esas cosas, había algo en él que destacaba sobre todas las demás: Su gran habilidad con el piano. Markus tocaba ese instrumento desde los 5 años, y lo hacía excepcionalmente bien, según muchas lenguas parecía haber nacido para eso. Mientras, yo seguía solo y apartado, escuchando a diario todos aquellos halagos que nuestros familiares y amigos vertían sobre mi hermano, adulaciones que no hacían más que alimentar a mi corazón con una amarga desazón. Sé que resultaba chocante observar un tan evidente sentimiento de celos y envidia en un niño de tan solo 3 años pero, esa era la pura verdad.
Un día, 2 años después, decidí dar un paso al frente, dispuesto a ocupar mi lugar en aquel mundo que solamente idolatraba a los genios, a los que fueran capaces de hacer cosas que resultaran imposibles para otros y, para ello, me decanté igualmente por la música. Entre todos los instrumentos que encontré a mi disposición, elegí el violín, no porque solamente me gustara especialmente entre todos los demás, si no por suponía un reto para mí. El violín era y sigue siendo el instrumento más difícil que existe, y sobre el que sobrevolaban diversas y siniestras leyendas, asegurando que solo uno fue capaz de dominar dicho instrumento, pues siempre es él el que te domina a ti…
Nada más pedirlo, y seguramente por su sentimiento de culpabilidad por favoritismo, mis padres me obsequiaron con un atezado y hermoso instrumento. Durante días, noches, años… Estuve practicando con aquel violín, encerrado en mi habitación, hasta olvidarme de lo que era tener sensibilidad en las yemas de los dedos índice y corazón de la mano derecha. Mis allegados aseguraban que no se me daba nada mal, pero para mí no era suficiente… Mi hermano seguía eclipsándome de una manera feroz, y yo ya no podía soportarlo más…
Con el transcurso de los años, y tras haber tenido algo de reconocimiento entre los más entendidos del mundo musical, por fin llegó mi momento, el momento de suplantar a mi hermano, de ser mejor que él, de eclipsarlo… Una fuerte gripe lo había obligado a meterse en la cama precisamente el día que tenía que dar un gran concierto, lo cual no pudo ser. Entre delirios de fiebre me pidió que lo supliera, que eligiera una bonita pieza, y que la tocara ante el fiel público que lo había seguido durante tantos años, y ante el que tantas veces tocamos a dúo. Yo, por supuesto, no le iba a decir que no.
Elegí para la ocasión el capricho número 4 de Paganini, una de las más difíciles partituras jamás compuestas, la misma que muy pocos han sido capaces de representar a la perfección. Aquello era perfecto, todo estaba saliendo redondo, era una señal… Aquella era la noche en la que me decidiría a hacer lo mismo que un día habría hecho el mismísimo Paganini, vender su alma al diablo…
Desesperadamente, y solo dos horas antes del comienzo del concierto, me sumergí en los más oscuros barrios de mala fama de la ciudad, buscando uno de aquellos lugares que solo frecuentaban gente extraña y aficionada a lo oculto. Por suerte, no tardé mucho en encontrar a una misteriosa mujer que me ofreció, por muy pocas monedas, llevar a cabo el ritual.
Y ahí estaba yo… Invocando al diablo, pidiendo intercambiar mi alma por lo que más deseaba en aquella vida, ser alguien, destacar en algo… Por un momento, durante tan tenebroso rito, me sentí avergonzado de mí mismo, y sería un mentiroso si no dijera que también sentí miedo. ¿De verdad necesitaba hacer eso para sentirme mejor? ¿De verdad era eso lo que quería? ¿Era lo correcto? Sí, desde luego que si…
Trascurrida una escasa media hora, la diabólica ceremonia llegó a su fin y yo corrí hacia el teatro. El concierto fue un verdadero éxito, simplemente espléndido… Las notas de Paganini eran arrancadas de mi cuarteto de cuerdas, una a una, de una forma maravillosa, con la musicalidad más perfecta que mis oídos hubiera oído nunca… Desde el principio me sentí flotar, como si estuviera soñando, muy seguro de mí… El violín y yo éramos uno, sentía que lo dominaba, su arco bailaba en mi mano como lo haría la mejor parea de amantes, sus cuerdas vibraban entre mis dedos de la manera más armoniosa, más virtuosa que había sentido jamás.
Durante mi interpretación podía ver los rostros de los presentes, la mayoría de ellos aristócratas para los que acudir al teatro era simplemente un pasatiempo, pero, a juzgar por la expresión de sus caras y el tamaño de sus ojos, aquella noche su visita a aquel edificio supuso más que una mera distracción. Solo cuando terminé y el teatro rebosó con aplausos de admiración, volví en mí. Jamás me había sentido tan vivo, tan lleno de júbilo, tan orgulloso… Lo había conseguido…
Rápidamente, nada más terminar la función, corrí hacia mi casa, ahora me tocaba a mí cumplir con mi parte del contrato… Sabía que él vendría, sabía que vendría a cobrarse mi deuda, y yo no quería hacerlo esperar. Apenas curzé unas palabras con mi mujer durante el trayecto de vuelta, ella me notaba raro, desde luego, pero había algo dentro de mí que me decía que era mejor que no supiera nada de lo que solo hacía un rato había hecho. Sus palabras de elogio, a las que solamente contestaba con movimientos de cabeza, no causaron la más mínima reacción en mí, estaba ausente, concentrado… En mi cabeza solamente había una cosa, pagar la deuda con la que esa noche me había empeñado.
Una vez llegué a mi habitación cerré la puerta con llave, dejé mi valioso instrumento sobre la mesita, no sin antes darle una última caricia, como agradeciéndole la gran noche que me había dado. A continuación, relajado, o intentando estarlo, me senté sobre la cama dispuesto a esperar, esperar… Intentaba mantener los ojos cerrados pero una misteriosa fuerza, posiblemente provocada por el propio miedo y nerviosismo que me invadían, me obligaba a mantenerlos abiertos. En silencio volví a observar aquel violín que descansaba sobre su estuche abierto, la luz de la luna parecía acariciarlo, como si por arte de magia se hubiera abierto aquella rendija entre las cortinas para dejarla pasar únicamente para él… Dotándolo de un aspecto fascinante, misterioso y único, pero a la vez siniestro… Tan siniestro que era capaz de provocar una cruel batalla dentro de mí, en el que el miedo y la atracción intentaban ganarse el mismo lugar en mi corazón, en mi razón…
Los minutos pasaban y nada ocurría, el sonido de las agujas del reloj caía sobre mí como gotas de plomo, cada vez más y más pesadas… Los rostros de los asistentes a la actuación volvieron a formarse en mi mente, tan claros como si volviera a tenerlos delante. Lo habían disfrutado, les había gustado, lo había hecho bien. Una fanfarrona sonrisa empezó a asomar en mis labios, empezaba a pensar y a sentir que aquello que acababa de hacer no lo había conseguido gracias a ninguna fuerza sobrenatural o diabólica, sino gracias a mí, a mi talento, a mis dedos…
El tiempo seguía pasando, convenciéndome, con cada segundo que pasaba, de mi propio talento natural, aquel que había llevado encerrado todos estos años anteriores, aquel que otros se encargaron de confinar con sus palabras adornadas de suspicacia. Hasta que, de pronto, pude sentir algo, las llamas de las velas comenzaron a parpadear y… A alargarse, como si algo fuera capaz de cogerlas de sus ardientes puntas y estirarlas.
Ya no estaba solo en la habitación… Por lo que agudicé mis sentidos todo lo que pude para que nada se adelantara a mí, para que nada me sorprendiera… Lo primero que pude percibir fue el sonido de una fuerte respiración que venía desde el rincón que quedaba justo detrás de mí. Lentamente, y aguantando la respiración, pues no quería que ningún otro sonido se interpusiera entre aquella respiración y mi oído, me fui girando. Lo que descubrí a continuación hizo que mi sangre se detuviera, y mi corazón se congelara… Aquel ser era lo más grotesco, terrorífico y espantoso que cualquier otra criatura protagonista de las peores pesadillas que cualquier mortal se hubiera atrevido a soñar jamás.
Su altura no era superior a la mía, pero gracias a los dos imponentes cuernos que brotaban de su frente, daba la sensación de que sí lo era. Sus manos, extremadamente grandes con respecto a su cuerpo, terminaban en uñas afiladas y negras cuya caprichosa forma las hacían parecer garras. Sus pies no eran pies, sino pezuñas de animal… Seguramente, de haber reparado más en ellas, hubiera podido compararlas con las de algún animal de la familia de los caprinos. Su rostro era simplemente indescriptible… Sus rasgos eran muy duros y profundos, sus pómulos estaban tan marcados que parecían incluso capaces de cortar el acero, y su barbilla, extremadamente larga, dotaba al perfil de su rostro con la forma de una media luna. Justo en medio de esa cara, de piel demoníacamente rojiza, dos ojos pequeños, tan rojos como lo debían ser las llamas del infierno, brillaban con malicia.
Durante largos segundo no reaccioné, era como si mi cuerpo entero se hubiera congelado. Pero no tardé mucho en arrodillarme delante de esa figura a pesar de la desilusión que no podía dejar de sentir al saber que había sido obra de él, y no de mi talento, el resultado de aquel maravilloso concierto.
—Lucifer, Rey de las tinieblas.—Le dije.—Te ofrezco mi alma a cambio de lo que esta noche has hecho por mí.
—No aceptar tu alma.—Me respondió el diablo, con una voz tan cavernosa que incluso retumbó en las paredes de la habitación.
—¿Por qué? Es un alma pura, ¿por qué no puedes aceptarla?
—Porque ya es mía…




miércoles, 6 de abril de 2016

Lava




Hoy, y aunque sea una tontería, quiero compartir con vosotros una de las visiones más espectaculares que he tenido en toda mi vida: La del volcán Arenal de Costa Rica.
A lo largo de mi vida he tenido la oportunidad de viajar y ver cosas de las que antes solo disfrutaba en las revistas y en la televisión. Y una de las que más me ha calado, y cada vez que lo cuento todo el mundo me nota aún la emoción en mi voz, es la de este volcán.
Llegamos a San José sobre mediados de noviembre, hace ya algunos años, y durante las dos semanas siguiente estuvimos disfrutando de playas, selvas y demás lugares tropicales. En total visitamos tres volcanes, el Poás, el Irazú y el Arenal, por este orden. Pero aunque los tres se encuentren activos hay algo que diferencia al tercero de los otros dos, la lava viva cayendo por sus laderas…
La primera vez que lo ví fué a través de la ventanilla del automóvil, irguiéndose ante nosotros como una gran mole verde. Lo primero que lo diferenciaba de los otros dos era que este se encontraba solo, alzándose solitario sobre un ancho valle. Su cima estaba cubierta por una oscura nube, y aunque aún no había visto la lava que expulsaba, ni lo había escuchado rugir, podía ver en él la vida de la que carecían los anteriores, ahora convertidos en fósiles de cóleras pasadas, en montañas que una vez rugieron pero que ahora dormían…
En el Arenal, la puerta hacia el centro de la tierra estaba abierta, y un incandescente magma la atravesaba a su antojo. Cuando pudimos rodearlo a pie, vimos como la cara oeste de su ladera estaba completamente verde y plagada de vegetación, mientras la este, aquella que era constantemente atravesada por los ríos de lava sulfurosa, ofrecía el grisáceo aspecto de un paisaje lunar.
Un atrayente aura siniestra rodeaba aquel volcán, que rodeado de la más pura selva recordaba al paisaje sacado de “El mundo perdido” de Doyle, o al mismísimo “Jurassic Parck”. Aquel volcán parecía tener el poder de transportarnos a eras remotas, aquellas en las que aún el hombre no dominaba la tierra, aún virgen, sin contaminación, sin talas, sin guerras…
En torno a esta gran bestia, los costarricenses habían construído al menos una docena de hoteles desde los cuales se podía observar el volcán desde una distancia prudente. Todos ellos eran tranquilos y estaban bastante alejados unos de otros. El “Observatorio VistaLodge” Fue el elegido por nosotros. Por desgracia, no encontramos ningún camino que nos permitiera acercarnos al coloso, todo estaba meticulosamente controlado y calculado, todos los caminos se cortaban una vez se había alcanzado la distancia de seguridad mínima con el Arenal, al contrario que con el Poás y el Irazú, los cuales no contaban con zona restringida. Con este tercer volcán se sentía el respeto hacia la más salvaje naturaleza, con un volcán en erupción no se juega…
La noche es un momento ideal para contemplar al Arenal, y la primera que nosotros pasamos allí estaba totalmente despejada, cubriéndonos un cielo limpio, plagado de brillantes estrellas a las que no tapaba ni él más mínimo ápice de contaminación. No sé a que hora me fuí a la cama ese día, ni tampoco quiero recordarlo, los hilos de lava resbalando por los costados de su perfecto cono para terminar apagándose a los pocos minutos, tan brillantes, tan ardientes… Me hipnotizaban… Claramente recuerdo el retumbo del suelo de la habitación cuando fuí a meterme en la cama, igual que el que suele sentirse cuando tu vecino de abajo arrastra a la vez todos los muebles de su casa.
Ahora han pasado los años, pero aún lo puedo ver en mi mente, en mi recuerdo, tan claramente como si li volviera a tener delante. Espero tener la posibilidad de volver a visitar ese hermoso país de nuevo, espero poder tener el privilegio de tener un espectáculo tan bonito ante mis ojos otra vez… Una de las más impresionantes y hermosas visiones de la naturaleza que he tenido en toda mi vida… Una visión de una naturaleza que entre todos nos estamos cargando…